Nuestra Misión
Esta es nuestra razón de existir
Como un cuerpo, vivimos para Guiar a las personas hacia la salvación, Llevarlas hacia la madurez y Equiparlas como Siervos Fieles a Dios. [SFD]
¿Qué es un SFD?
ESTO es a lo que aspiramos ser
Un SFD es un Siervo Fiel a Dios. No somos perfectos. Somos personas de diferentes edades que amamos a Jesús. Estamos creciendo en nuestra relación con Dios y somos transformados por el Espíritu Santo, esta transformación es puesta en evidencia por el fruto de madurez espiritual en nuestras vidas. Hay seis rasgos que caracterizan a un SFD:
- Ama y honra a Dios
- Entiende las Escrituras
- Explica el Evangelio
- Le enseña a la gente sobre Dios
- Da generosamente
- Sirve con fidelidad
Nuestra Visión
Esto es en lo que nos estamos convirtiendo
Ministramos a los SFD en la cantidad de idiomas a la que Dios nos dirija, cultivando una iglesia que es multilingüe, transcultural y multigeneracional.
A esto nos referimos:
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MULTILINGÜE
Ministramos a las personas en la cantidad de idiomas a la que Dios nos dirija a través de nuestros programas CRECER.
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TRANSCULTURAL
Celebramos la diversidad cultural y la unidad espiritual del Cuerpo de Cristo.
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MULTIGENERACIONAL
Ministramos a personas de todas las edades de una forma relevante para su lenguaje y su cultura.
Nuestro nombre
¿Qué significa ethnos?

Ethnos es una palabra griega usada en la Biblia para describir a la iglesia como una comunidad formada por muchas naciones.
La Biblia dice en 1 Pedro 2:9 que somos un ethnos santo, llamados a amar a Dios y a servirle con fidelidad para darlo a conocer entre las naciones. Por eso nos encanta el nombre Ethnos. ¡Aceptar la diversidad, amar a Dios, servir con fidelidad!
¡Nuestro nombre lo dice todo!
Nuestros Valores
Esto es lo que nos importa
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GRACIA: Todos tenemos una segunda oportunidad (y una tercera, y una cuarta...).
Creemos en amar a las personas incondicionalmente porque Dios nos ama con un amor incondicional y nos llama a hacer lo mismo. Por lo tanto, fomentamos una comunidad donde las personas son aceptadas, no juzgadas; donde los heridos son restaurados y alentados para crecer en santidad. Le enseñamos a las personas a enfocarse en lo que se están convirtiendo en Cristo, no en sus errores del pasado. Animamos a las personas a compartir la gracia de Dios con otros, así el mundo podrá conocer y amar a Dios, la fuente de la gracia.
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FAMILIA: Ya sea soltero o casado, el hogar es nuestro primer ministerio.
Creemos que la familia es la primera responsabilidad en el ministerio. Por lo tanto, invertimos nuestro tiempo para encaminar a los niños y jóvenes hacia la madurez espiritual, y guiamos a los padres para que formen a sus hijos con principios bíblicos y responsabilidad.
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DIVERSIDAD: Celebramos la multiculturalidad y la unidad del Cuerpo.
Creemos que celebrar la diversidad cultural es un reflejo de madurez espiritual porque esto es una expresión de la mente y Cuerpo de Cristo. Por lo tanto, buscamos intencionalmente alcanzar a los miembros de nuestra comunidad que hablan otros idiomas y fomentamos un ambiente acogedor para que las personas de diferentes trasfondos puedan adorar a Dios en la unidad del Cuerpo de Cristo.
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MISIONES: Compartimos del amor de Dios dentro y fuera de las fronteras.
Creemos que la pasión por expandir el Reino de Dios en todo el mundo es un reflejo del corazón de Dios, así como un reflejo de madurez espiritual. Por lo tanto, creamos conciencia y oportunidades para que las personas se involucren en las misiones. Invertimos nuestros recursos para enviar a miembros espiritualmente maduros de nuestra congregación para edificar la iglesia global y para apoyar proyectos internacionales a los que Dios nos dirija.
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ADMINISTRACIÓN: Invertimos generosamente.
Creemos que dar con gozo es un reflejo de madurez espiritual, ya que esto expresa el carácter de Dios y sus mandamientos. Por lo tanto, invertimos sacrificialmente nuestro tiempo, habilidades, dinero e instalaciones para el avance del Reino de Dios. Enseñamos los principios bíblicos de ofrendar y canalizamos los recursos de Dios hacia sus intereses en el mundo.
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ORACIÓN: Dependemos de Dios para todo.
Creemos que la pasión por la oración es un reflejo de madurez espiritual porque esto es una expresión singular de intimidad con Dios. Por lo tanto, invertimos nuestro tiempo en confesar nuestros pecados, buscar la dirección de Dios en todos los aspectos de nuestro ministerio, interceder unos por otros y alabar a Dios por todas las cosas. Sabemos que sin oración estamos indefensos y sin rumbo, somos superficiales y andamos en nuestras propias fuerzas.
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LIDERAZGO: Entrenamos a líderes piadosos.
Creemos que los líderes espiritualmente maduros son esenciales para cultivar una iglesia dinámica. Por lo tanto, nombramos líderes-siervos que cumplan los requisitos bíblicos y que hayan demostrado un carácter íntegro para ocupar diferentes posiciones ministeriales. Honramos a nuestros líderes, nos sometemos a ellos y hacemos que rindan cuentas, sabiendo que Dios los ha envestido con Su autoridad. Entrenamos nuevos líderes reconociendo su potencial y su carácter, y confiándoles mayores niveles de responsabilidad.
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TRABAJO EN EQUIPO: Hacemos el ministerio juntos.
Creemos que el trabajo en equipo es una expresión de nuestra nueva identidad como miembros del Cuerpo de Cristo y algo esencial para permanecer en el tiempo. Por lo tanto, animamos a nuestros hermanos a usar sus dones y servir en equipo para cumplir nuestra misión y visión. Enseñamos que el trabajo en equipo incrementa la creatividad, profundiza las relaciones y permite una mayor rendición de cuentas. Dirigimos a nuestros hermanos en la evaluación de su trabajo para aumentar la efectividad del ministerio y asegurar un crecimiento sostenido.
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INNOVACIÓN: Evaluamos e implementamos nuevas ideas para mejorar el ministerio.
Creemos que un ministerio eficaz se logra a través de iniciativas creativas que están alineadas con nuestra misión. Por lo tanto, buscamos mejorar nuestro ministerio a través de ideas definidas en equipo por las que hemos orado, pensado con creatividad, implementado de manera inteligente y evaluado honestamente. Deseamos aprender las lecciones de intentos fallidos, viéndolos como oportunidades de mejora. Por fe invertimos nuestros recursos en innovación, sabiendo que Dios suplirá nuestras necesidades para seguir siendo efectivos y relevantes en la expansión del Reino de Dios.
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EXCELENCIA: Honramos a Dios con lo mejor de nosotros.
Creemos que servir a Dios con excelencia es el sello de un corazón que ama a Dios. Por lo tanto, buscamos desarrollar cada uno de nuestros ministerios con lo mejor de nuestras habilidades, sabiendo que todo lo que hacemos debe ser hecho como para Dios y no para los hombres.
Nuestra Doctrina
esto es lo que creemos, enseñamos y proclamamos
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LA BIBLIA: Es la inspirada e inerrante Palabra de Dios.
Aceptamos los textos originales del Antiguo y Nuevo Testamentos como la inerrante Palabra de Dios, inspirada verbalmente en su totalidad y, por lo tanto, suficiente como nuestra única, infalible y autoritativa regla de fe y práctica. (Salmo 119:160; Proverbios 30:5a; 2 Timoteo 3:16, 17; 2 Pedro 1:19-21)
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DIOS: Él es trino y su inmutable carácter es santo, justo y amoroso.
Creemos que Dios es un ser trino, inteligente, soberano, espiritual y personal; perfecto, infinito y eterno en su ser, perfecto en santidad y amor, sabiduría y poder; separado absolutamente y por encima del mundo como su Creador, sin embargo, presente en todo el mundo como Sustentador de todas las cosas. Es revelado a nosotros como Padre, Hijo y Espíritu Santo, tres personas distintas, pero sin división de naturaleza, esencia o ser, y cada uno con diferentes ministerios en la relación de Dios con su creación y pueblo. (Génesis 1:1; Éxodo 15:11; Salmos 83:18; 139:7-9; Mateo 28:19; Juan 10:30; 15:26)
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JESÚS: Él es la segunda persona de la Trinidad y el único Salvador del mundo.
Creemos que Él es la segunda persona del Dios Trino, el Verbo Eterno y el Hijo Unigénito; que sin sufrir cambio en Su divinidad, se hizo hombre a través del milagro del nacimiento viriginal, será siempre verdadero Dios y verdadero hombre, una persona con dos naturalezas; que como hombre fue tentado en todo, pero sin pecado, que como el perfecto Cordero de Dios se entregó a sí mismo para la muerte de cruz, llevando sobre Él el pecado del mundo y pagando por nosotros la pena completa por la ira de Dios; que Él resucitó de la tumba en un cuerpo glorificado; que como nuestro gran Sumo Sacerdote ascendió al cielo para presentarse ante Dios como nuestro Abogado e Intercesor. (Juan 1:1, 14, 3:16; Mateo 1:18-25; Gálatas 4:4, 5; Filipenses 2:6-10; 1 Corintios 15:3-7; Hebreos 4:14-16; 1 Juan 2:1, 2)
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LA SEGUNDA VENIDA: Jesús regresará para establecer Su Reino en un momento desconocido del futuro.
Creemos que Jesús volverá en las nubes para raptar a Su Iglesia, que es nuestra esperanza bienaventurada, siempre inminente; que después de resucitar a los muertos en Cristo y llevarse de la tierra a los que todavía viven de Su Iglesia, derramará sus justos juicios sobre el mundo incrédulo y después descenderá con Su Iglesia y establecerá su glorioso y literal reino sobre las naciones de la tierra por mil años. (1 Tesalonicenses 4:13-18; Santiago 5:8; Hebreos 10:37; Judas 14, 15; Apocalipsis 19:11-16; 20:4-7)
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EL ESPÍRITU SANTO: Él es la tercera persona de la Trinidad, quien mora en el creyente desde la conversión.
Creemos que Él es la tercera persona de la Trinidad, y el Agente divino en naturaleza, revelación y redención; que Él convence al mundo de pecado, justicia y juicio; que Él regenera, habita, bautiza, sella y unge a todos los que han sido hechos hijos de Dios a través de Cristo; que Él además capacita, guía, enseña, santifica y llena a los creyentes que se rinden diariamente a Él. (Juan 3:5; 14:16, 17, 26, 16:7-14; Romanos 8:9; 1 Corintios 12:13; 2 Corintios 3:18; Efesios 1:13; 5:18)
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ÁNGELES: Dios creó a las criaturas angelicales para que le sirvan. Algunos de ellos se le rebelaron.
Creemos que Dios creó a todos los ángeles. Muchos de ellos permanecen fieles a Dios y son espíritus que Dios usa para ministrar a Su pueblo. Algunos siguieron al ángel Satanás en su orgullosa rebelión en contra de Dios y se convirtieron en adversarios demoníacos de Dios y Su pueblo. Estos ángeles son limitados por la omnipotencia de Dios y esperan su encarcelamiento final en el lago de fuego. (Génesis 1:1; Éxodo 20:11; Salmos 33:6; Apocalipsis 12:3-4; Mateo 12:24-27; Job 2:1-2; Apocalipsis 20:10; Mateo 26:41; Hebreos 1:13-14)
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SATANÁS: Él es el máximo engañador, quien usa sus tácticas para alejar a las personas de Dios.
Creemos que Satanás fue creado como un ser santo y perfecto, pero que debido al orgullo y a una ambición malvada se reveló contra Dios, convirtiéndose así en un ser totalmente depravado, el gran adversario de Dios y Su pueblo, líder del resto de ángeles y espíritus malignos, el engañador y dios de este mundo; que sus poderes son amplios, pero limitados por Dios, quien en Su soberanía y voluntad permisiva domina las artimañas malévolas de Satanás; que él fue vencido y juzgado en la cruz, y que su destino final es seguro; que somos capaces de resistirlo y vencerlo solo con la armadura de Dios y a través de la sangre del Cordero y del poder del Espíritu Santo. (Isaías 14:12-15; Efesios 6:12; 1 Pedro 5:8;1; 1 Juan 3:8; Apocalipsis 12:9-11; 20:10)
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HUMANOS: Fuimos creados a la imagen de Dios pero nos hicimos pecadores, así que necesitamos un Salvador.
Creemos que el hombre fue una creación de Dios, hecho a su imagen y semejanza; que por desobediencia personal a la voluntad revelada de Dios el hombre se convirtió en una criatura pecadora, el padre de una raza caída que es universalmente pecadora en naturaleza y en práctica, por lo tanto, separado de la vida y la familia de Dios, bajo la justicia y la ira de Dios, sin medios posibles en sí mismo para alcanzar la salvación. (Génesis 1:27; 3:6; Salmos 51:5; Romanos 3:23; 5:12, 19; Gálatas 3:11)
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MATRIMONIO: Una institución sagrada creada por Dios para ser un pacto de vida entre un hombre y una mujer.
Creemos que Dios creó a Adán y a Eva para que señorearan sobre la creación y fructificaran la tierra con descendencia piadosa en perfecta relación con Dios. Para señorear sobre la creación en perfecta armonía, Dios le asignó el rol de cabeza al hombre y de ayuda idónea a la mujer. Sin embargo, a causa del pecado, los seres humanos han distorsionado el diseño original del matrimonio en tres áreas: las personas han redefinido la naturaleza monógama heterosexual del matrimonio, han distorsionado los roles del matrimonio y han roto el pacto de por vida que Dios pensó para el matrimonio. En contraste a estas distorsiones humanas, Dios desea que Su pueblo acepte solamente las relaciones monógamas y heterosexuales, siempre dentro del contexto del matrimonio, porque cualquier otra conducta fuera de esos límites sagrados es inmoralidad sexual. Él desea que el esposo ame a su esposa con un amor sacrificial, tal como Cristo amó a la Iglesia, y que la esposa se sujete respetuosamente a su esposo como al Señor. Él desea que el esposo y la esposa enfrenten los conflictos en su matrimonio buscando la reconciliación. Dios odia el divorcio, sin embargo permite el divorcio y el matrimonio en segundas nupcias como una opción legítima en situaciones extremas. Dios rechaza cualquier versión humana del matrimonio que no sea monógama y heterosexual por naturaleza, y advierte que Él juzgará la inmoralidad sexual, porque esto atenta contra el orden establecido por Dios. (Génesis 1:26-31, 2:15-25, 3:1-24; Malaquías 2:13-17; Mateo 19:1-12; Efesios 5:21-33; 1 Corintios 7:1-16; Hebreos 13:4)
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SALVACIÓN: Somos salvos por la fe en Jesús, solo por Su gracia, no por nuestras obras.
Creemos que la salvación es un regalo de Dios, no es merecida ni asegurada por ninguna obra del hombre, sino recibida solo por la fe personal en el Señor Jesucristo, en quien todos los creyentes verdaderos poseen en el presente el regalo de la vida eterna, una justicia perfecta, la pertenencia a la familia de Dios, la liberación y protección ante cualquier condenación, todos los recursos espirituales para la vida y la santidad, y la garantía divina de que nunca perecerán; que la salvación impacta al hombre en su totalidad; que fuera de Cristo no hay salvación. (Efesios 2:8, 9; Tito 3:5; Juan 1:12, 3:14, 10:28, 29; Romanos 8:1; Filipenses 1:6)
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PIEDAD: Amar a Dios y desear honrarlo es el fruto sobrenatural de la verdadera salvación.
Creemos que la piedad no es de ninguna forma un medio de salvación, sino su evidencia y fruto, por lo tanto, como cristianos debemos obedecer la Palabra de Dios, buscar las cosas de arriba, andar como Él anduvo, aceptar como una responsabilidad solemne el deber y privilegio de llevar el Evangelio a un mundo perdido; recordar que una vida cristiana victoriosa y fructífera es posible solo para aquellos que en gratitud ante la infinita e inmerecida misericordia de Dios se entregan por completo a Cristo. Esto debe ser demostrado al mantener un hogar piadoso, al dirimir las diferencias con otros creyentes en la iglesia, evitando la carnalidad, exhibiendo el fruto y llenura del Espíritu, y cumpliendo la Gran Comisión al hacer discípulos. (Mateo 28:19-20; Hechos 1:8; Romanos 12:1, 2; 1 Corintios 6:1-8; Gálatas 5:16-23; Efesios 2:8-10, 5:18-22, 6:4; Filipenses 2:16; 1 Pedro 4:10-11)
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RESURRECCIÓN: El pueblo de Dios resucitará para vida, los inconversos serán juzgados.
Creemos que el espíritu de los salvos al morir va inmediatamente al cielo con Cristo, que sus obras serán juzgadas en el tribunal de Cristo para determinar recompensas, lo cual tendrá lugar cuando Cristo venga por los suyos; que al morir, el espíritu de los inconversos desciende inmediatamente al Hades donde son sujetos a castigo hasta el día del juicio final, en el que sus cuerpos serán resucitados, serán juzgados y enviados al Infierno, el lugar de castigo eterno. (1 Corintios 15; 2 Corintios 5:8-10; Lucas 16:19-23; Apocalipsis 20:11-15)
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SACERDOCIO DE TODOS LOS CREYENTES: Una persona salva tiene acceso directo a Dios y es su representante en el mundo.
Creemos que Cristo es nuestro gran Sumo Sacerdote y que a través de Él todos los que han nacido de nuevo tienen acceso directo a la presencia de Dios sin necesidad de un sacerdote humano; que el creyente tiene el derecho y la responsabilidad de estudiar personalmente e interpretar las Escrituras guiado por el Espíritu Santo. (Juan 14:6; Hebreos 4:16; 2 Timoteo 2:15; 1 Pedro 2:1, 5, 9)
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EL SEÑORÍO DE JESUCRISTO: Él es la cabeza de la Iglesia y su pueblo lo honra.
Creemos que solo Él es la cabeza del Cuerpo, en el que todos los creyentes verdaderos son inmediatamente bautizados por el Espíritu Santo; que todos los miembros de este cuerpo espiritual deben reunirse e identificarse en iglesias locales. (1 Corintios 12:13; Efesios 1:22, 23; 4:11-15; Gálatas 1:22)
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LA IGLESIA LOCAL: Todos los creyentes deben organizarse en comunidades para servir a Dios en unidad.
Creemos que la iglesia del Nuevo Testamento es una asamblea local de nuevos creyentes bautizados, unidos en torno a una organización para practicar las ordenanzas del Nuevo Testamento, para reunirse para la adoración, oración, compañerismo, enseñanza y testimonio, y para involucrarse activamente en llevar a cabo la Gran Comisión. (Hechos 2:41, 42; 1 Corintios 11:2; Mateo 28:19, 20)
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LAS ORDENANZAS: La iglesia practica dos símbolos: el bautismo por inmersión y la Santa Cena.
Creemos que el bautismo es por inmersión de los creyentes en agua, representando así la muerte, sepultura y resurrección de Jesucristo; que la Santa Cena es la participación del creyente en el pan y la copa como un recordatorio continuo del cuerpo quebrantado y la sangre derramada por Cristo. (Mateo 28:19, 20; Hechos 2:41, 8:38,39; Mateo 26:26-30; 1 Corintios 11:23-34)
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LA AUTONOMÍA DE LA IGLESIA LOCAL: La iglesia local es un grupo independiente y autónomo de creyentes.
Creemos que cada iglesia del Nuevo Testamento es libre de ser autónoma, sin interferencia eclesiástica, y que debe cooperar con otras iglesias del Nuevo Testamento guiada por el Espíritu Santo; que es responsable de seguir el modelo de la iglesia del Nuevo Testamento y que es directamente responsable ante Dios. (Mateo 18:17; Hechos 6:1-5, 13:1-3, 15:22, 23)
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SEPARACIÓN IGLESIA-ESTADO: Son dos entidades separadas con distintas responsabilidades.
Creemos que cada entidad tiene una definición propia y distintas esferas de responsabilidad. (Mateo 22:21; Romanos 13:1-7)
Escríbenos a: contact@ethnoschurch.org
Alex
Crecí siendo parte de Kids Zone; también crecí armando figuras con LEGO®. He aprendido mucho sobre el amor de Dios y la Biblia. Nos gustaría que otros niños también puedan aprender de una forma divertida, como fue para mí el RETO ARMADURA: construir la Armadura de Dios al ir contestando preguntas sobre la Biblia. ¡Que lo disfrutes!
(Juega RETO ARMADURA) “LEGO® es una marca registrada del Grupo LEGO el cual no patrocina, autoriza o respalda este sitio”.